Una transformación total de la vivienda de aprox. 100 m2 y la terrazza de 25 m2 fue el deber, que abarcaba la reconstrución de los sistemas de las instalaciones, el diseňo interior y el de ciertos muebles. La vivienda nueva, desarollada casí 100 aňos después de la construcción del edificio residencial, moderno, construido a principios del siglo XX, se acopla de manera orgánica en ello. La reforma fue muy generosa y las consecuencias son para aprender. El Cliente tuvó que conseguir una hipoteca exesivamente grande para la compra y para la reforma misma, gracias al precio irrealmente alto de este inmueble en la zona Buda, al hecho de que la intervención fue muy profunda y al uso de materiales de alta calidad. La crisis húngara de las hipotecas en divisas extranjeras (2009) hizo imposible mantener el inmueble apenas un par de años después de la reforma, por lo tanto la familia tenía que venderlo y el nuevo propietario lo reformó de nuevo.